Declaración CIEG ante movilizaciones feministas

El Centro Interdisciplinario de Estudios de Género de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Chile ante el escenario de movilización estudiantil feminista de las últimas semanas surgido como respuesta al ejercicio continuo de violencia física, sexual y simbólica contra las mujeres, se hace presente con este comunicado:

En primer lugar, expresamos nuestro apoyo a las estudiantes movilizadas en FACSO, en la Universidad de Chile y otras instituciones de educación superior, que se han tomado los espacios para exigir cambios culturales e institucionales profundos en relación a la desigualdad y violencia de género estructural que afecta en particular a las mujeres en diversos contextos. Apoyamos también a las académicas y funcionarias de las universidades que han solidarizado y levantado sus voces, no sólo declarando y denunciando sus propias realidades cotidianas, sino también por su trabajo activo y propositivo para que se cumplan las condiciones de igualdad, inclusión, dignidad y respeto en nuestras instituciones y más allá de ellas.

Como CIEG queremos manifestar nuestra contribución a las demandas de estudiantes, académicas y funcionarias, comprometiéndonos especialmente con las propuestas relacionadas con la instalación de una Educación No-Sexista y promover los cambios culturales a través de un nuevo trato en los vínculos internos y externos de nuestra universidad. En esa dirección, ofrecemos participar y colaborar en instancias de inducción, capacitación y educación en materias de igualdad de género y no discriminación para los diversos estamentos de la Universidad, así como en la necesaria inclusión de un curso transversal de género y feminismo para la Facultad de Ciencias Sociales. Creemos pertinente y necesario que este sea obligatorio para todos/as quienes deben formarse como profesionales de las ciencias sociales y la educación con mirada crítica. Asimismo, el CIEG está dispuesto a participar y colaborar con la revisión curricular de las carreras para asegurar una educación no sexista, sin sesgos androcéntricos y con enfoque de género.

Respecto a los protocolos de actuación ante casos de acoso sexual, laboral y discriminación arbitraria, consideramos que se ha hecho un trabajo de gran valor, pero que ha resultado insuficiente ante la profunda naturalización de conductas y discursos discriminatorios en las aulas, y en otros espacios académicos, y a la falta de voluntad particular para dar a conocer a los diversos estamentos materias de acoso y violencia sexual. Nos comprometemos a continuar trabajando en conjunto con la Dirección de Igualdad de Oportunidades de Género para perfeccionar los diagnósticos y planificación de medidas que se enfoquen en la prevención, y en el correcto y ético seguimiento de los casos denunciados, y la fiscalización de fallos y sanciones.

La incorporación a las demandas de los derechos de madres y padres estudiantes, académicos/as y funcionarios/as es un elemento que enriquece los horizontes de igualdad, y al mismo tiempo pone de manifiesto la vulnerabilidad de quienes no poseen contratos regulares y se ven afectadas y precarizadas en sus diversos derechos laborales y maternales.

Hacemos, por último, un llamado a todos/as a sumarse a las reflexiones y debates que se están abriendo y trabajar en colectivo en la búsqueda de soluciones que apunten a cambios culturales profundos al interior de nuestra universidad y fuera de sus fronteras, para promover una sociedad más inclusiva, ética, pero sobre todo un nuevo trato que garantice relaciones sociales de género igualitarias.